Uno de los servicios con más éxito ahora en Internet es, sin duda, el de las redes sociales. Sobre todo entre usuarios de entre 14 y 30 años, según datos de la Agencia Española de Protección de Datos (AGPD). Con las redes sociales los internautas pueden estar conectados entre sí, usar el servicio de mensajería, subir fotografías a Internet, videos, comentarios, etc. El participar en una red social supone crear un perfil en el que concedes, voluntariamente, una serie de datos. El problema de esto es que no se es consciente del alcance de lo que publiquemos, ni de quién tiene acceso a ellos si no privatizamos el perfil. Además de una intromisión en su vida privada, entre los jóvenes se han dado casos de abuso, humillación pública, acoso. Es grande la polémica que ha suscitado el “boom” de estos servicios y a ella está dedicando la AGPD buena parte de sus investigaciones. Su director, Artemi Rallo, ha llegado al Congreso de los Diputados con el asunto. Declara que no basta con informar a los menores de los peligros de la red, que lo que avise la letra pequeña no les impresiona al crear un perfil y que hay que tomar mayores medidas de prevención. Así, la AGPD de Madrid inició una campaña que llevó a cabo el 28 de enero, día europeo de la protección de datos. En ella su principal objetivo son los adolescentes. Presento el proyecto antes numerosos institutos: una charla informativa y una serie de spots para concienciar del peligro y responsabilidad.
El video publicado al principio es uno de los que formaban esta campaña, en concreto uno que creó la homóloga de la AEPD en Noruega.
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